A solo meses de las elecciones legislativas y presidenciales del 2022 en Colombia, la tensión incrementa entre los diferentes partidos aspirantes a llegar al poder político en los próximos comicios.
El uribismo y su partido, el Centro Democrático, junto con algunos medios tradicionales, han iniciado una campaña de desprestigio contra los líderes de la Colombia Humana y los precandidatos de la coalición del Pacto Histórico.
La estrategia del uribismo para 2022
El uribismo, que se ha hecho con el poder durante los últimos años, parece estar sufriendo el rechazo de un sector significativo de la población colombiana, y ha estado enfilando todos sus ataques a sus opositores más sólidos, la Colombia Humana y el Pacto Histórico.
Gustavo Petro, excandidato presidencial en 2018 se convirtió en el máximo líder de oposición en el país con una votación sin precedentes. Su movimiento, la Colombia Humana y la coalición del Pacto Histórico, hoy constituyen el más grande obstáculo para la victoria del uribismo en los nuevos comicios.
Los ataques han ido desde las calumnias por supuesta instigación a la violencia y al terrorismo en el marco del paro nacional indefinido por parte de Gustavo Petro y Gustavo Bolívar, hasta asuntos personales que poco a nada están relacionados con temas electorales.
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Los ataques contra la Colombia Humana
Los medios tradicionales y simpatizantes del uribismo señalaron insistentemente a la Colombia Humana de promover el caos en el país y la violencia contra la Fuerza Pública durante el estallido social.
Además, fueron señalados de financiar grupos terroristas por la compra de elementos de seguridad para los jóvenes de primera línea.
Portadas de medios como Revista Semana, enfilaron sus ataques contra el senador Bolívar, que también ha sido agredido por asuntos relacionados con deudas y finanzas personales que, incluso, él ha justificado mediante evidencias, como fue el caso del hijo del actor Bruno Díaz. Algo que debe gestionarse ante instancias como la Cámara de Comercio.
Las rentas e impuestos del senador Bolívar también se han convertido en materia para arremeter en su contra y hasta la marca de zapatos del senador Petro.
Este tipo de ataques se ha convertido en el común denominador de los últimos meses contra la oposición en Colombia, sobre todo contra quienes puntean en las encuestas.
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