En entrevista con el programa Los Informantes, del Canal Caracol, el magnate colombiano Luis Carlos Sarmiento Angulo dio a conocer la vida sencilla que lleva, un poco parecida al cuento infantil “La pobre viejecita” del poeta colombiano, Rafael Pombo. En dicha entrevista reconoció que tiene comodidades, pero insinuó que su vida era una vida sencilla, nada fuera de lo normal. Cecilia López le jala las orejas a Luis Carlos Sarmiento Angulo.
“Tengo comodidades, es decir, tengo una buena casa, tengo algún avión también, tengo una casa en las Bahamas, en fin, tengo comodidades. Nada del otro mundo ni nada para hacer locuras, cosas normales”, así explicó Sarmiento la vida sencilla y nada fuera de lo normal que lleva uno de los hombres más ricos de Colombia.
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El empresario colombiano atendió una entrevista en el programa Los Informantes, del canal Caracol, con la periodista María Elvira Arango, debido a su valiosa contribución al sector salud, con la construcción y dotación el Centro de Tratamiento e Investigación sobre el Cáncer Luis Carlos Sarmiento Angulo (CTIC), en la ciudad de Bogotá.
En medio de la entrevista, el millonario empresario respondió algunas preguntas sobre temas referentes a su vida, pero algunas de sus respuestas generaron una lluvia de críticas, debido a que, mientras hablaba, parecía referirse a sí mismo como una persona corriente sin mayores privilegios.
Lo que llamó la atención de algunos usuarios de las redes sociales fue su descaro al hablar de su vida “sencilla, nada del otro mundo”, mientras que muchos colombianos, a duras penas, alcanzan a comer una sola vez al día.
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Muchos calificaron como insolencia, el hecho de que Sarmiento pueda considerarse viviendo una vida sencilla, como sí la viven la mayoría de los colombianos, que no poseen una buena casa o un avión.
Otros colombianos no entienden cómo una persona puede vivir tan desconectada de la realidad que viven millones de colombianos en el país, a espaldas de muchos que, por más de 15 años, tienen que estar pagando para poder acceder a tener una casa pequeña, donde su familia pueda crecer.
La forma como Luis Carlos Sarmiento Angulo, siendo uno de los hombres más ricos del mundo y el más adinerado en todo el país se describe a sí mismo, sin considerar la vida de sus vecinos, le valieron los adjetivos de «sobrador», «desconectado» y «egocéntrico», expresados por muchos internautas.
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