El actor Gregorio Pernía, quien es muy reconocido en el mundo de la actuación por sus distintas interpretaciones, decidió confesar algunos episodios de su vida que revelan su sincera personalidad.
El actor colombiano, nació en una familia bástate numerosa, creció lleno de afecto y cariño, siempre se caracterizó por ser el líder en las reuniones familiares.
Algunas vivencias de Gregorio Pernía
La incursión del actor en el mundo de la interpretación dramática fue pura casualidad; pues un anunció en el directorio hizo que el hombre contemplara la posibilidad de ser actor, pero a pesar de sus grandes logros el camino no fue fácil.
A sus inicios se vio vetado por año y medio como actor, pues el talentoso hombre no encontraba trabajo en ninguna producción, debido a una influyente productora colombiana.
Ante esta situación decidió marcharse a México con Marcela Mar, su esposa en ese momento, para continuar después la búsqueda de su futuro en Miami, Estados Unidos.
En esa época, el actor debía buscar la manera de sobrevivir y salir adelante, por eso, Gregorio decidió hacer lo inimaginable para lograr sus sueños; como vender rosas en las calles, lo cual le resultó bastante rentable.
“Tenía un sueldo mensual que me daba la productora, que era un buen sueldo. Pagaba el apartamento, mi carro, pero igual trabajaba muy poco. Me encontré un señor en la playa que me dice que tenía una bodega de rosas y, dije: voy a vender rosas”, aseguró el actor.
Mientras vendías las flores exportadas de Colombia, Pernía se llevó una dura sorpresa que nunca ha podido olvidar: “Una actriz me ve vendiendo rosas en Miami, que estaba haciendo la novela conmigo. Iba en un BMW y me dice: ¡Gregorio! Yo me volteo con las rosas y, me dice ¿Qué haces? Yo le digo: vendiendo rosas”. Su compañera de trabajo después de verlo, cambio su trato completamente.
En Miami creció como profesional y su economía mejoró; pero su relación sentimental con la actriz Marcela Mar decayó. En ese momento de su vida, quería experimentar nuevas sensaciones, conocer aspectos y realidades que hasta ese momento no había explorado.
La droga dejó de ser un tabú para Gregorio: “voy a responder como responden todos los candidatos presidenciales en Colombia, cuando les preguntan ¿Usted ha consumido drogas? Todos dicen: la probé una vez y no me gustó. Todos dicen eso y se han fumado una hectárea”.
Su carrera profesional quedó marcada cuando realizó el casting de la película “Rosario Tijeras”, para interpretar a John F. Para poder realizarlo le pidieron que leyera el libro e improvisará las escenas.
El actor decidió ser creativo y presentar una propuesta diferente: “llamé al que hace los efectos especiales y alquilé dos armas. Me fui a las cuatro de la mañana al sitio donde estaban haciendo el casting. Y dije: los voy a secuestrar de verdad, ese es mi casting”. Sin ninguna duda el director decidió darle el papel.
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