En Barranquilla, el cacho puede ser considerado ‘patrimonio inmaterial’ y en el último tiempo, los políticos de esta ciudad y del Atlántico han estado en escándalos de infidelidad, amantes y cachos.
La sociedad barranquillera se reúne entre ellos mismos, algunos son empresarios, personajes cuestionados, políticos tradicionales, contratistas, cada quien con sus propios intereses y sus corrientes políticas.
Por ejemplo, Nicolás Petro, hijo de un presidente de izquierda, estaba casado con Day Vásquez, una mujer relacionada al clan Char, su hijo tiene de madrina a Elsa Noguera, la mano derecha de los Char.
Los cachos en Barranquilla
Nicolás Petro: la infidelidad de Nicolás Petro le costó su credibilidad, la exesposa Day Vásquez comenzó a vengarse con declaraciones y chats que lo pusieron en tela de juicio.
El hijo de Petro le metió cachos con una de las mejores amigas de Day, la sra. Laura Ojeda.
Alex Char: el heredero del Clan Char le metió cachos a Katia Nule, el exalcalde de Barranquilla se metió con la excongresista Aída Merlano y con su amigo Héctor Amaris (el oso yogui).
Las declaraciones las realizó Aída Merlano, la amante de Alex Char en su momento.
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Catherine Juvinao: la congresista de la Alianza Verde recibió un anillo de compromiso de Eduardo Beherentz.
Juvinao confirmó que su prometido le metió una cachera donde no hubo poder para una reconciliación.
Pero no todo pasa en política, la cante barranquillera Shakira también fue víctima de los cachos, el futbolista Gerard Piqué le metió cachos con su asistente (Clara Chía).
La atlanticense Melissa Martínez también la dejaron cuando su expareja Matías Mier le fue infiel con otra mujer.
Tan popular es el cacho en Barranquilla que, en Soledad (Atlántico) crearon la Asociación de Cachones de la Costa (ASOCASOL).
¿Se pude decir que los barranquilleros son cachones por naturaleza?
