La alcaldesa de Bogotá Claudia López organizó un evento para reconciliar a los familiares y a la ciudadanía con las autoridades, en la Plaza de Bolívar se llevó a cabo dicho evento que no contó con la asistencia del presidente Iván Duque.
Iván Duque quien se encuentra casi al lado de la Plaza de Bolívar dejó la silla vacía, en un acto de reconciliación fallido, de igual forma la Policía Nacional de Colombia no envió a ningún representante a hacer presencia.
Las protestas que hasta la fecha han dejado 13 personas muertas (10 en Bogotá y 3 en Soacha), más de 300 heridos y 194 policías lesionados según cifras oficiales, se convierte en una de las manifestaciones con más víctimas de los últimos años.
- Postobón de Ardila Lülle: el dueño de un color
- ¿Cómo inscribirse para el subsidio de Renta Joven?
- Falla en iluminación paraliza operaciones nocturnas en aeropuerto de San Andrés
Claudia López pide perdón
Como primera autoridad de la ciudad de Bogotá, Claudia López se despachó contra la Policía Nacional de Colombia por los actos de violencia que han venido realizado durante las protestas.
Culpó a la Policía de utilizar armas de fuego durante las manifestaciones, dejando más odio y rencor entre los colombianos.
Algunos líderes de iglesias cristianas, participaron del evento convocado por la alcaldesa, ellos enviaron un mensaje de paz y de esperanza a las familias víctimas de esta lamentable masacre.
Las victimas le pidieron al gobierno local y al gobierno nacional, esclarecer los asesinatos de sus familiares, entre llanto y dolor las víctimas se preguntaron ¿Dónde está el presidente?
La silla vacía de Iván Duque
Un familiar de una víctima dijo: “Aquí debería estar el presidente y la Policía Nacional pidiéndonos perdón por lo ocurrido” esto tras ver que el presidente nunca llegó a la Plaza de Bolívar.
La presidencia de la República aclaró que envió al comisionado de Paz, Miguel Ceballos, y Nancy Patricia Gutiérrez, consejera Presidencial para los Derechos Humanos.
Iván Duque si hizo presencia con los policías heridos durante las manifestaciones.
Fuente: El Espectador
