El fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, aseguró que la protesta social en Colombia se estaba convirtiendo en escenario para grupos criminales y terroristas que querían crear caos con lo que llamó «terrorismo urbano«.
Así se refirió Barbosa respecto a los últimos disturbios que han tenido lugar en Colombia, en su mayoría como protesta en contra de las decisiones del Gobierno en materia de crisis, del asesinato de líderes sociales y el abuso de la Fuerza Pública.
Las manifestaciones han sido consideradas como actos vandálicos, en los que se vieron destruidos varios CAI’s, buses de transporte público, locales comerciales y demás patrimonios públicos y privados.
Además, en los enfrentamientos con policías y miembros del ESMAD, varios civiles han resultado heridos, y otros han perdido la vida.
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«Plan criminal orquestado»
Lejos de considerar que dichos actos fueron justificados por la indignación generada en la población que salió a las calles a protestar en señal de rechazo por los últimos acontecimientos del país, el fiscal lo consideró un espacio invadido por grupos terroristas.
Grupos que vendrían extendiendo su campo de acción desde la ruralidad hasta las urbes colombianas.
Según afirmó, bandas criminales estarían infiltrándose para perfilar jóvenes, desestabilizar la institucionalidad del Estado, amenazar la democracia y corromper el derecho a la legítima manifestación ciudadana.
