El presidente chino, Xi Jinping, pronunció un discurso que duró casi dos horas en un congreso del Partido Comunista el domingo, iniciando un cónclave que se espera que extienda su gobierno a una segunda década. Boeing 737 MAX realiza su primer vuelo comercial en China.
Más de 2300 delegados cuidadosamente seleccionados de todo el país se han reunido en Beijing para el evento de una semana, que ocurre una vez cada cinco años. Marcará el tono de la política en los próximos años y reorganizará a los principales funcionarios del país.
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En el Gran Salón del Pueblo, en la plaza de Tiananmen, Xi pregonó los logros del partido desde que llegó al poder hace una década y describió los principios para el gobierno y las políticas del partido en los años venideros.
¿Qué dijo Xi Jinping?
Desde los primeros días de la pandemia, las políticas de control de COVID de China han significado fronteras estrictas, pruebas masivas obligatorias, vigilancia digital invasiva, cuarentenas forzadas y cierres rápidos, a menudo de ciudades enteras.
Xi dijo en el 20º Congreso del Partido que el enfoque de China «pone a las personas y las vidas por encima de todo». No ofreció señales de que las estrictas reglas COVID de China terminarían pronto.
«Al lanzar una guerra popular total para detener la propagación del virus, hemos protegido la salud y la seguridad de las personas en la mayor medida posible y hemos logrado logros tremendamente alentadores tanto en la respuesta a la epidemia como en el desarrollo económico y social», dijo.
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China comenzó el año apuntando a un crecimiento económico de «alrededor del 5,5%». El objetivo no se ha desechado oficialmente, pero las autoridades no tienen la menor posibilidad de alcanzarlo, gracias, en gran parte, a la política de «covid cero dinámico».
«Debemos intensificar los esfuerzos para avanzar en la reforma y explorar nuevos terrenos, y debemos permanecer firmes en expandir la apertura», dijo.
Xi ha dicho que el compromiso de China con la reforma y la apertura no flaqueará. Al mismo tiempo, ha aumentado el papel del estado en los asuntos económicos y ha tomado medidas drásticas para poner bajo control lo que él ve como sectores rebeldes, como bienes raíces, tecnología y educación extracurricular.
Taiwán ha cobrado gran importancia para todos los líderes de China desde que el Partido Comunista llegó al poder en 1949, pero Xi lo ha presionado con un mayor sentido de urgencia.
«En la actualidad, cambios trascendentales como no se han visto en un siglo se están acelerando en todo el mundo», dijo Xi. «Está en marcha una nueva ronda de revolución científica y tecnológica y transformación industrial, y se está produciendo un cambio significativo en el equilibrio de poder internacional, lo que presenta a China oportunidades estratégicas en la búsqueda del desarrollo».
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