Preocupación en México por altos efectos adversos de la vacuna Pfizer y BioNTech en la población

Estrategia de vacunación de México
Estrategia de vacunación de México.

El director general de Epidemiología, José Luis Alomía Zegarra, quien dirigió el informe técnico diario por coronavirus del 17 de enero de 2021, informó que veinticinco personas vacunadas han presentado reacciones graves luego de recibir la primera dosis proporcionada por Pfizer Inc. y BioNTech. También señaló que cuatro de ellas, todos trabajadores de la salud, continúan hospitalizadas.

La Secretaría de Salud informó que desde el inicio de la vacunación el pasado 24 de diciembre se han presentado un total de 1252 casos notificados de ESAVIs, ocurrencias médicas adversas que se producen después de la inmunización.

Los 1252 casos representan el 0.26% del total de las personas que han sido vacunadas, y las notificaciones de casos graves suponen un 2% entre todas las reacciones adversas.

El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, agregó que los casos que han requerido de hospitalizaciones, se han presentado en personas jóvenes de 28 años hasta adultos de 64.

La mayor parte de este grupo son mujeres y el médico epidemiólogo explica que esto se debe a que la población de trabajadores de la salud está integrado mayormente por ellas.

“Fiebre, mareo, náuseas, dolor de cabeza, dolor y enrojecimiento en el sitio de inyección son parte de la respuesta inicial a la vacuna y hacen parte de la respuestas inmunes no graves que duran de dos a tres días y se quitan espontáneamente”, dijo el encargado de las medidas gubernamentales contra la pandemia por la enfermedad de COVID-19.

Por otro lado, en Noruega se encendieron las alarmas luego de que fallecieran 33 personas de 75 años o más después de ser inmunizadas con la vacuna de Pfizer Inc. y BioNTech.

Las primeras investigaciones indicaban que los efectos secundarios podrían haber causado las reacciones graves en los ancianos.

Sin embargo, la Agencia Noruega de Medicamentos informó que todos padecían enfermedades graves, y que no se encontraban alarmados debido a que la Covid-19 supone claramente un mayor peligro que la vacuna.

Las autoridades concluyeron que no hay una relación directa entre las muertes de estos vacunados y la vacuna recibida. “Podemos decir que puede ser una coincidencia”, indicaron finalmente.