La ciudad de Cali se encuentra consternada tras la trágica muerte de María José Ardila, una joven estudiante de 23 años. El fallecimiento ocurrió después de que Ardila participara en un absurdo reto con licor en un bar de Cali (SAGSA Bar).
El establecimiento, según los reportes, ofrecía una recompensa de 1 millón y medio de pesos ($1.500.000 COP) a la persona que lograra tomar la mayor cantidad de licor en el menor tiempo posible. Este lamentable suceso ha desencadenado una investigación por parte de la Fiscalía General de la Nación y una inspección de las autoridades sanitarias al local comercial donde ocurrieron los hechos.
Fiscalía inicia indagación tras muerte de María José Ardila
La Fiscalía ha iniciado una indagación formal para determinar las responsabilidades penales detrás del fallecimiento de la joven. María José Ardila era estudiante de ingeniería alimentaria en la Universidad Santiago de Cali. Según el relato de su padre, la noche de la tragedia, ella estaba acompañada de amigos y decidió aceptar el desafío propuesto por el bar.
La muerte de Ardila, quien además se había convertido en madre hace muy pocos meses, ha puesto el foco sobre las prácticas de este tipo de establecimientos y la aparente falta de protocolos de emergencia adecuados.
¿En qué consistía el peligroso reto del bar? El reto que terminó con la vida de María José Ardila era extremo. Según la descripción proporcionada por su padre, el desafío implicaba varias etapas de alto riesgo para la salud.
En primer lugar, la joven debió tomar tres «shots» de licor sin utilizar las manos. Inmediatamente después, el reto exigía que la participante consumiera trece copas de aguardiente de manera continua; la regla era hacerlo sin parar y sin regar nada de la bebida.
Finalmente, la prueba concluía con la ingesta de ocho tragos de diferentes licores. Esta última parte del desafío tenía la condición de que los tragos debían ser bebidos directamente, sin el uso de pitillo.
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La tragedia: Broncoaspiración y muerte cerebral
Momentos después de completar esa desbordada ingesta de alcohol, María José comenzó a vomitar. La situación se complicó fatalmente segundos después, cuando la joven broncoaspiró.
Su padre relató los críticos momentos posteriores y el estado en el que llegó al centro médico. «La niña ya había durado demasiado tiempo sin oxigenación en el cerebro», explicó a medios. Esta prolongada falta de oxígeno, médicamente conocida como hipoxia, «lleva a la muerte cerebral».
El padre de la víctima también describió la angustia vivida para llevarla al hospital y lo que presenció al llegar. «Llaman a un amigo que vivía cerca del sitio». «Él vuela realmente, las recoge y las lleva al hospital». «Cuando ya van ellos en camino, me llaman, yo salgo como loco».
Al llegar al centro asistencial, logró ingresar al área de reanimación. «Cuando llego yo al hospital me entro como pude a la parte de reanimación». Fue allí donde presenció el peor escenario para un padre. «Estando en la parte de reanimación, veo morir a mi hija tres veces», narró con profundo dolor, refiriéndose a los intentos fallidos de resucitación.
¿Quién era María José Ardila?
La comunidad académica y sus seres queridos lamentan la partida de una joven con un futuro prometedor. María José Ardila tenía 23 años y cursaba la carrera de ingeniería alimentaria en la Universidad Santiago de Cali.
Tenía grandes sueños y metas profesionales; entre ellas, soñaba con terminar sus estudios para luego irse a vivir al extranjero. Su vida personal también estaba en una etapa de plenitud. Estaba casada desde hacía tres años «con un excelente esposo», según las conmovedoras palabras de su padre.
El dolor es aún más profundo para la familia, ya que la pareja tenía un bebé de apenas 10 meses. «Nos dejó un nieto espectacular de 10 meses», compartió el padre de María José (Andrés Ardila) en Noticias Caracol. Al recordarla, la describió como una persona excepcional. «No, mi hija es una persona espectacular, divina», «con toda la vida por delante».
La respuesta del bar y la inspección de las autoridades
Tras conocerse la tragedia, los dueños del bar involucrado publicaron un comunicado. Sin embargo, la respuesta del establecimiento ha generado más preguntas que respuestas, ya que también se reportó que cambiaron su cuenta de Instagram sin ofrecer explicaciones claras sobre los motivos de esta acción.
La Secretaría de Salud de Cali reaccionó a la noticia pública realizando una visita de inspección al bar donde ocurrieron los lamentables hechos. De acuerdo con el reporte preliminar de las autoridades, la documentación del establecimiento estaría en regla.
A pesar de esto, la investigación de la Fiscalía continúa su curso para esclarecer las responsabilidades penales que pueda haber en la promoción del reto y la reacción del personal del bar.
Las autoridades recordaron la obligación legal de los establecimientos comerciales en estas situaciones. Se enfatizó que «cualquier establecimiento que tenga una persona que tiene un problema de salud como un desmayo, etcétera, debe inmediatamente accionar a los organismos de socorro, a las entidades de salud». Para esto, existe la línea 123 en todo Colombia, que es la línea de emergencias designada «para cualquier tipo de emergencia».
Redacción Tendencias Pluralidad Z.
