El hombre más rico de Colombia, Luis Carlos Sarmiento Angulo, se convirtió en tendencia tras el publirreportaje pagado por el ciudadano francés Jean Luc Yves Serge Barbier en el Espectador. Aunque Pluralidad Z se ha convertido en un crítico del poderoso magnate colombiano, en esta ocasión el interés colectivo le da parcialmente la razón.
La empresa cuestionada es Promigas, que genera más de 5 mil puestos de trabajos entre directos e indirectos en la región Caribe. Además, el holding Corficolombiana la tiene cotizando en la BVC, por lo que es una empresa pública de la cual usted puede ser socio.
Jean Luc está vendiendo sus hectáreas en lotes parcializados o en su defecto, esperar que sale con las demandas.
El caso de Jean Luc Yves Serge Barbier
En agosto de 2006, el ciudadano compró 6.5 hectáreas en la finca cerros de piedra, muy cerca de la vía nacional que conecta a Turbaco con Cartagena de Indias.
Resulta que, con la expansión de Surtigas en el departamento de Bolívar, la tubería de Promigas debía pasar por el predio de Barbier, en 2013 efectivamente la tubería pasó sin previo aviso.
Los ciudadanos de Turbaco, Arjona y Turbana necesitan el gas para mejorar la calidad de vida, también para mover el comercio y el transporte, mientras que el francés supuestamente quería construir un complejo vacacional.
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Si bien se cuestiona el procedimiento y la indemnización a un tercero por $4.5 millones de pesos, el bien colectivo respalda a Promigas. Si fuera por el señor francés, más de 140 mil habitantes de estos municipios no tuvieran servicio de gas o tuvieran un costo más alto por este servicio.
El ciudadano quien actualmente quiere una indemnización por $4.800 millones de pesos o que le compren el terreno por $6.700 millones de pesos pone en manifiesto ante la opinión pública sus verdaderos intereses. Aunque también debería obtener una indemnización justa.
Qué es más importante: ¿la empresa con capital colombiano que genera miles de empleos en el país o los intereses particulares de un ciudadano extranjero?
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