
La carrera por la candidatura presidencial de 2026 en el Centro Democrático enfrenta su momento más crítico. El senador Andrés Guerra anunció en los últimos días su renuncia irrevocable a la precandidatura, en una sentida intervención en W Radio.
Esta decisión se produce en medio de la tormenta política desatada por el aplazamiento de la encuesta interna, que debía realizarse en noviembre y ahora se pospone hasta febrero de 2026. La senadora Paloma Valencia, también precandidata, reaccionó en vivo a la dimisión de Guerra, pidiéndole reconsiderar y defendiendo la institucionalidad del partido.

La renuncia de Andrés Guerra producida por la crisis en el centro democrático
La noticia política del día se centró en la decisión del Centro Democrático de cambiar las reglas de juego pactadas para elegir a su candidato único. Los cinco precandidatos (Paloma Valencia, María Fernanda Cabal, Paola Holguín, Miguel Uribe Londoño y Andrés Guerra) habían recorrido el país y esperaban la contratación de la encuesta este mes. El aplazamiento hasta febrero fue el detonante para Guerra, quien expresó su descontento y dolor.
«El espacio tiene sus límites», afirmó Guerra. «Dijimos claramente que había un procedimiento, había unas fechas». El senador antioqueño, visiblemente afectado, relató el desgaste de un proceso que inició en febrero de 2024 y que, según él, cambió drásticamente tras el atentado a Miguel Uribe Turbay (q.e.p.d.) el 7 de junio y su posterior fallecimiento el 11 de agosto, sumado al proceso judicial contra el expresidente Álvaro Uribe.
Guerra, quien obtuvo la cuarta votación al Senado en 2022, reconoció que no era el favorito, pero que su intención era «pasar la línea de meta» y recibir su «diploma», sin importar si quedaba de quinto. «Yo en este momento no me siento útil como precandidato de nuestro partido y por eso me hago a un costado», sentenció.
Aseguró que continuará en el partido y mantendrá su máxima de «unidad igual victoria», pero que alguien debía hablar con «sensatez» sobre la sensible situación en el «camerino» del partido.
En la misma entrevista, la senadora Paloma Valencia lamentó la decisión de su copartidario. «Yo espero que Andrés reconsidere», expresó, calificándolo de «buen compañero» y «hombre maravilloso». Para Valencia, las adversidades políticas deben invitar a la unión, no a la desunión.

«Este es un partido que tiene vocación de poder», enfatizó Valencia, reconociendo que el partido viene creciendo en la oposición al gobierno de Gustavo Petro. Sobre los cambios en el proceso, Valencia ofreció una lectura institucional. Sostuvo que, dado que los consensos entre los candidatos fracasaron y se hicieron públicos los problemas, es «lógico» que la organización política «tome el control del proceso».
«Ya las reglas no las ponen los candidatos, las reglas las va a poner el partido», afirmó. Valencia se mostró confiada en que el partido elegirá a su candidato, sometiéndose a cualquier mecanismo, incluso bromeando con «una rifa». Su optimismo la llevó a asegurar que el candidato del Centro Democrático será el próximo presidente de Colombia.
Durante el diálogo radial, se planteó que la contienda interna estaba «contaminada» por la aparición de figuras externas o ‘outsiders’ que, sin pertenecer al partido ni «hacer la tarea» de recorrer el país, están ganando simpatías. Se mencionaron específicamente los nombres del Dr. Pinzón y de Abelardo de la Espriella.
Valencia respondió a esta inquietud con ironía: «Me alegra mucho que reconsideren y que hoy entiendan que estas son las ideas que Colombia necesita y que el presidente Uribe es y seguirá siendo un símbolo». Si bien reconoció que la gente «se emociona con figuras nuevas», confía en que al final se reconocerá «el trabajo largo y concienzudo».

¿Dos candidatos y sin encuesta? Las nuevas reglas
La senadora Valencia también aclaró las nuevas directrices anunciadas por el partido. Explicó que la fecha del 6 de febrero de 2026 no es cuándo se escogerá el candidato, sino el «plazo máximo» para tener definidos los nombres que irán a la consulta interpartidista de derecha en marzo de ese año.
Además, confirmó una revelación crucial, el partido podría tener no uno, sino dos candidatos. «Yo creo que nosotros llegamos a un acuerdo cuando entró el Dr. Miguel Uribe Londoño de que el partido podía tomar la decisión de tener dos candidatos», afirmó Valencia, subrayando que «la palabra se honra».
Andrés Guerra validó esta información. Confirmó que en una reunión en Rionegro, Antioquia, en agosto, «se dejó la puerta abierta» para tener un máximo de dos precandidatos, ya fallecido Miguel Uribe Turbay.
Redacción Política Pluralidad Z.



