Sofía Vergara protagoniza Griselda, un héroe de una causa equivocada

Daniel Mejía sobre Griselda y Sofía Vergara
Daniel Mejía sobre Griselda y Sofía Vergara.

Una cosa es dar noticias y otra muy diferente es construir información, la narrativa del entretenimiento no puede normalizar la cultura de las mafias, comparar a Griselda con Gabriel García Márquez como lo hizo un columnista en un medio de Colombia, no es coherente, ver a un tractocamión aspirando polvo blanco que simula la cocaína en París, degrada la imagen de Colombia, es así y punto.

Es absolutamente lamentable la manera como la productora Netflix destruye la imagen, dignidad y los valores culturales de una nación. Mientras algunos adoctrinados por los medios de comunicación defienden la producción GRISELDA, por el “gran papel” de Sofia Vergara quien encarna una mujer criminal, narco, prostituta y coyote, en el análisis profundo y semiótico de esta realidad nos encontramos frente a otra producción más con una inversión publicitaria millonaria que busca destruir a Colombia, nuestra cultura y además promocionar la prostitución infantil, la trata de personas, el crimen organizado y la cocaína como producto principal de la nación.

No falta el defensor de la cultura traqueta, por supuesto la justificación de la industria cultural se enfoca en que esto es entretenimiento, una sociedad entretenida con sangre.

No es posible que veamos en una serie de Netflix como se recrea el genocidio del Estado de Israel con el pueblo de Palestina en Gaza, y la manera como Estados Unidos lo financio, no esto no lo creo porque para los gringos esta no sería una producción del interés de su gloria nacional.

Pero destruir la imagen de Colombia si lo es, pisotear la diversidad cultural de Latinoamérica se ha convertido en una tradición para las productoras norteamericanas. Mientras Sofía Vergara disfruta de las mieles de la fama y el dinero fácil, las niñas prostitutas de Cartagena, menores de edad, se preparan para una temporada alta, porque el turismo sexual, traqueto y de drogas en Colombia seguramente va a crecer exponencialmente en el 2024 gracias a NETFLIX.

En el informe que realice para el Tercer Canal de Colombia, me permitía hacer una reflexión cuestionando la capacidad del Congreso de la Republica para proteger los intereses de Colombia, el principal cuidar su honra y buen nombre, como lo hacen países desarrollados del primer mundo.

Al momento de escribir este artículo, el Twitter posteado en la red X desde mi cuenta personal @DanielMejiaLoz2 había llegado a 636 mil personas con un video visto por más de 240 mil espectadores generando 2,12 mil comentarios, muchos de estos donde me insultan y defienden a capa y espada al crimen organizado que representa esta serie, es el estímulo y respuesta del entretenimiento traqueto que inyecta coca en sus audiencias.

Hoy nos encontramos en una sociedad de consumo criminal, suena un poco duro, pero de esta manera se ha determinado la comunicación de masas de los últimos tiempos. La teoría de la aguja hipodérmica de Bauer es muy importante para este análisis, en esta tesis se plantea una sociedad que dentro del término de `masa` se encuentra aislado, y hacia ese punto es donde se dirigieron las críticas a esta teoría.

Las mismas  a cargo de Raymond Bauer demostraron que el público nunca puede ser pasivo, sino que dentro de la sociedad hay una colectividad en la cual los individuos interactúan entre ellos y con otros factores externos. Se defiende una comunicación unidireccional, del emisor hacia el receptor que carece de interacción.

Aunque con las redes sociales se genera una falsa percepción de interacción, hoy nos encontramos ante un publico que no interactúa, la comunicación es unidireccional en su esencia, hay ruido y una falsa percepción de libertad de expresión, eso es diferente.

Ahora bien, nos invaden el subconsciente con imágenes publicitarias en todos los escenarios de la vida cotidiana, Griselda llega al subconsciente de quien camina desprevenido por la calle, ha ingresado en su psiquis sin darse cuenta, actúa en los jóvenes adultos y hasta niños, sin embargo como lo plantea esta teoría de la comunicación, el público nunca puede ser pasivo, es ente punto donde quiero concentrarme para hacer un análisis.

La aguja hipotérmica plantea que todo estímulo tiene una respuesta. En este caso la serie de Griselda genera un estimulo al dinero fácil, la prostitución, la droga, el crimen desmedido, la ausencia de valores, el desafío a la justicia y todos estos estímulos en una sociedad donde la juventud esta anestesiada por los valores de consumo, son muy peligrosos porque seguramente tendrán un efecto mortal en un porcentaje de quienes no vean en su vida otro camino y busquen unirse a estas redes criminales para tener una falsa vida heroica como la de Griselda.

No obstante, en este momento en medio de una falsa libertad de expresión nos encontramos abocados a la espiral del silencio. Quiero recordar a Elisabeth Noelle-Neumann quien reafirmo en los años 40 la idea del poder de los medios con su teoría llamada “la espiral del silencio”, esta establece la posición del medio en un punto importante de la atención social, estudia la opinión pública como una forma de control social y su tendencia del espiral del silencio es a enmudecer a quienes prestan o tienen posiciones diferentes a las mayorías.

La agenda setting, desde la cual se plantea que los medios de comunicación de masas, para influir y determinar el grado de atención al público, dan a conocer ciertos temas y ocultan otros. Por ello mientras continua el genocidio en Gaza hoy Netflix busca determinar el grado de atención en Griselda, como me gustaría que acá en Paris la presencia publicitaria de Griselda se reemplazara por las imágenes del genocidio en Gaza para despertar conciencia y condenar al Estado de Israel por asesinar a niños y ancianos indefensos.

Es por lo anterior que quiero ser vinculante en la relación existente entre una productora como Netflix con organizaciones gubernamentales que utilizan este medio para alimentar el monstruo del narcotráfico y desaparecer el monstruo del genocidio con el entretenimiento que salpica sangre.

Para todos los efectos de este articulo, me quedo con la teoría de Habermas, quien considera que la reformulación de la teoría crítica de la sociedad debe operarse desde el lenguaje pues es ahí donde pueden rastrearse los procesos de reconocimiento intersubjetivo que originan un modelo de acción.

Este giro lingüístico significó el análisis de la acción comunicativa como un componente esencial de las formas de construcción de la realidad social. Gracias a medios de comunicación como la revista La Comuna, hoy podemos aplicar la teoría de Habermas, la teoría critica, en un contexto de análisis social, político y económico más allá del entretenimiento, es momento de pensarnos como se esta construyendo la narrativa para futuras generaciones y que responsabilidad tienen estas plataformas para contribuir o destruir con la esencia de la vida y el futuro de la humanidad.