La langostilla de río o cangrejo rojo, nuevamente hace presencia en parques y humedales de Bogotá tras dos años de ausencia, lo cual amenaza a la fauna silvestre y representa un riesgo para la salud humana.
Inicialmente la langostilla de río se encontraba en los municipios de Suesca, Chía y Fuquene. Sin embargo, se extendió a otros parques que hacen parte de la estructura ecológica principal de Bogotá: el parque Simón Bolívar, el parque El Tunal, el Parque Timiza y el humedal Juan Amarillo.
Langostilla de río en parques
Según la Secretaría de Ambiente, la langostilla de río contiene diferentes hongos, parásitos y bacterias, que al ser consumida por los ciudadanos pueden ocasionar efectos en la salud como gastroenteritis o diarrea.
La especie es originaria de Norteamérica, puntualmente del estado de Florida. Este animal fue traído inicialmente al Valle del Cauca para su aprovechamiento comercial, pero rápidamente se ha ido dispersando por todo el país, debido a que se adapta muy fácilmente a diferentes ecosistemas y su ciclo de reproducción es muy rápido.
Ángela Sánchez, bióloga del programa de la Universidad Central, explicó en una entrevista con Noticias RCN: “Tiene un gran impacto ambiental porque es una especie invasora y se reproduce súper rápido, debido a las condiciones de Bogotá. Durante la época de lluvia puede tener una postura de 200 a 500 huevos”.
La langostilla de río se caracteriza por tener una dieta amplia y son transmisoras de enfermedades para otros especímenes. Además, suelen competir por alimento con otras especies nativas como el cangrejo sabanero.
“Adicionalmente entra a competir con las especies nativas, alimentándose de lo mismo que están comiendo nuestras especies de acá. Eso lleva precisamente a que altere nuestros ecosistemas”, señaló la bióloga.
Respecto a las medidas de prevención que deben tener los ciudadanos, Sánchez resaltó: “La recomendación desde la Secretaría Distrital de ambiente y que hacemos desde el programa de Biología de la Universidad Central, es que si se las encuentran no las manipulen, porque son agresivas y territoriales. Lo mejor es llamar a la Secretaría. Son organismos que transmiten hongos y bacterias, por lo cual lo recomendado es no consumirla, ni entrar en contacto con estos organismos”.
Cabe resaltar que si se encuentra un cangrejo de este tipo tenga en cuenta: evita su manipulación directa, no le arrojes objetos que puedan lastimarlo, no lo cojas y no le suministres alimento.
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