
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha ordenado una nueva fase del Plan Independencia 200, activando un despliegue masivo de casi 200.000 efectivos militares, cazas de combate, sistemas de defensa y medios misilísticos en todo el territorio nacional.
Esta escalada militar, confirmada por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, es una respuesta directa, según el Gobierno de Caracas, a la presencia del portaaviones estadounidense ‘Gerald Ford’ en aguas del Caribe. La tensión diplomática y militar entre Venezuela y Estados Unidos alcanza así un nuevo pico.

Venezuela confirma la fase superior del plan
La decisión eleva la alerta militar al máximo nivel, coincidiendo con la llegada del ‘Gerald Ford’, el buque de guerra más grande y moderno de las Fuerzas Armadas de EE. UU.
El General en Jefe Vladimir Padrino López emitió un comunicado oficial informando que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) ha elevado sus niveles de alerta.
Esta acción cumple «órdenes impartidas por el ciudadano Nicolás Maduro Moros, presidente constitucional de la República Bolivariana y comandante en jefe». El anuncio detalla la ejecución de «una fase superior» del Plan Independencia 200, un mecanismo de respuesta castrense ordenado en septiembre para fortalecer los mecanismos de defensa ante el despliegue militar de Estados Unidos en la región.
Mientras Caracas denuncia la presencia del buque como una amenaza, el Pentágono ofrece una versión diferente. Washington ha confirmado la llegada del ‘Gerald Ford’ a Latinoamérica este martes 11 de noviembre. Sin ofrecer detalles sobre su localización exacta, un portavoz indicó que el portaaviones ayudará a «interrumpir el tráfico de narcóticos y desmantelar las organizaciones criminales transnacionales».
Esta justificación se enmarca en las operaciones antinarcóticos que el Ejército estadounidense ha realizado en el Caribe y frente a las costas del Pacífico, las cuales, según reportes, han involucrado al menos 19 ataques contra presuntos buques narcotraficantes, resultando en al menos 76 bajas.
La medida anunciada por Padrino López, que se implementará entre este martes 11 y el miércoles 12 de noviembre, es de amplio espectro. Implica la «puesta en completo apresto operacional» de todo el parque militar venezolano. Esto incluye el despliegue masivo de «medios terrestres, aéreos, navales, fluviales y misilísticos».

Además, se activan los sistemas de armas, las unidades militares, la Milicia Bolivariana y los Órganos de Seguridad Ciudadana, coordinados bajo los Comandos de Defensa Integral.
El Gobierno de Maduro ha hecho un llamado a ejecutar este plan bajo una de las máximas organizativas del chavismo, la «perfecta fusión cívico-militar-policial». Padrino López, en nombre de la cúpula militar, declaró que la FANB está «más fortalecida que nunca en su unidad, cohesión moral y equipamiento, junto al pueblo venezolano, para preservar a toda costa los sagrados intereses del país».
Contrariamente a algunos vaticinios que sostenían lo contrario, tanto durante el año electoral de 2024 como en 2025, año en que Maduro asumió nuevamente funciones presidenciales, los militares venezolanos han ofrecido reiteradas muestras de su total adhesión a los intereses y la narrativa política del chavismo.
Aunque la situación interna del país luce tranquila, e incluso persiste la incredulidad en muchos sectores, son frecuentes las advertencias que hace el alto Gobierno chavista en sus alocuciones públicas sobre la eventualidad de un ataque militar estadounidense.
El oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), acordó en una asamblea extraordinaria el paso a «una fase armada del proceso revolucionario», en caso de que se desaten las hostilidades. Este tipo de advertencias, intercaladas con llamamientos a la paz, se han vuelto cada vez más frecuentes.
Hace días, el propio Nicolás Maduro afirmó, en una reunión política con seguidores sindicales, que «la orden está dada: si se atenta contra el país, declararemos una huelga general, insurreccional y revolucionaria». El mandatario venezolano había afirmado en esa ocasión que la clase obrera «es el mayor escudo que tiene Venezuela ante una agresión imperialista».
Redacción Internacional Pluralidad Z.



