
Indignación generan los afiches y carteles publicitarios de tinte político pegados en las endebles palizadas de las humildes viviendas del municipio guajiro de Uribia; que invitan a votar por el candidato del Partido Conservador a la Cámara de Representantes Juan Loreto Gómez. La Guajira, un departamento entre la pobreza y la basura
“En la mitad de la pobreza en Uribia, un candidato a Cámara del partido Conservador, Juan Loreto Gómez, tiene pancartas suyas. Habitantes dicen que les prometen tierras a cambio de su voto por él.”, así lo denunció Vanessa de la Torre, periodista de Caracol Radio.

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Uribia, ubicada en el departamento de la Guajira, es una tierra olvidada por el Estado; sin embargo, hay una época en que la clase política y los politiqueros del país, se acuerdan de ella: en tiempos de elecciones, época en que los pobres sí valen la pena.
La Guajira es uno de los departamentos más pobres del país, a pesar de la explotación de las minas de carbón más grande que existe a cielo abierto y las minas de sal de Manaure, entre otras riquezas culturales
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A lo largo de los años los dirigentes políticos del departamento han sido denunciados por corrupción, por lo que la Guajira se ha convertido en uno de los más corruptos del país.
Llama la atención que, a pesar de las muchas riquezas del departamento, la población continúa en estado de pobreza, siendo protagonista a nivel nacional de la muerte de niños por desnutrición.
La Guajira ha pasado por las perlas, el café, el dividivi, la sal, el contrabando, la marihuana, la gasolina, el gas natural y el carbón; y próximamente la bonanza del viento, por su situación estratégica para producir energía eólica.
La compra de votos reflejada en el ofrecimiento de tierras por votos, permiten que los elegidos, paguen sus favores a los financiadores de las campañas políticas, facilitando que los recursos para inversión social se queden en los bolsillos de estos para recuperar su inversión, sumiendo a la población en la pobreza.
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