El Senador de la República, Gustavo Bolívar, ha sido enfático en proponer una disminución del salario de los congresistas, que sea más justa y acorde a las funciones que desarrollan en el legislativo.
Ya que, según asegura, los congresistas laboran 8 meses al año y perciben ingresos equivalentes a 13 meses de trabajo.
Durante el periodo de pandemia, ha promovido que sean eliminados los $14 millones de pesos que son recibidos por los parlamentarios en gastos de representación, ya que, al mantenerse sesiones remotas que no exigían presencialidad, no se gastaba en viajes ni en desplazamientos.
A su vez, Bolívar ha abogado por el pago por sesión, sin embargo, ninguno de los proyectos que ha presentado han sido aprobados por el Congreso.
Tal es el caso también del proyecto para la reducción del período de vacaciones de los Congresistas a la mitad, propuesto en Cámara por Gabriel Santos, que se hundió al no poder siquiera discutirse en el legislativo, por falta de tiempo.
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Luego de que el presidente de la República, Iván Duque Márquez, fijara por decreto un aumento del 5.12% del salario para los Congresistas, porcentaje que aún se encuentra lejos de lo que se propone para el aumento del salario mínimo de los colombianos, varios congresistas, incluso de la bancada de gobierno, rechazaron el alza.
No obstante, el Senador Bolívar, expresó claramente en la W Radio, que los mismos senadores que hoy rechazan el alza fijada por el Jefe de Estado, se han encargado de hundir las propuestas que ha presentado para la disminución de salarios, de los gastos de representación y del pago por sesiones.
“Los que están diciendo que hay que negarse al alza de los congresistas son los que hunden el proyecto”
Resumió Bolívar.
Ante esto, el senador manifestó que los colombianos deben votar con conciencia, de modo que las mayorías del Congreso estén conformadas por parlamentarios decentes, independientemente de su partido, que propendan por las iniciativas que busquen un país más justo y equitativo.
A su vez, son muchos quienes aseguran que la negativa de la bancada de gobierno al alza se trataría de una estrategia de doble moral, que les haga ganar popularidad de cara a las elecciones presidenciales del 2022.
