Duque es cercano a los entes de control como: el Fiscal, el Defensor del Pueblo y la Procuraduría, lo cual ha ocasionado que el uribismo tenga más poder, pues se ha perdido la autonomía de los órganos que deben ejercer control sobre el ejecutivo.
En los últimos meses, en medio de la pandemia el presidente ha aprovechado para coaptar estos entes, que tienen mucho que ver con el control político del país; pero no solamente en el Congreso, donde tiene cercanía con las mayorías; sino también en la Fiscalía, entre otras esferas del poder.
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Puntos que cuestionan las decisiones de Duque
Se podrían dar problemas en la transparencia de la distribución de los recursos, pues con la emergencia económica, el gobierno ha tomado decisiones que han dado como resultados diferentes decretos y actos administrativos, sin pasar por el Congreso.
Esto puede significar un peligro para la democracia del país. Un ejemplo claro y vigente son las irregularidades que se han dado en los recursos para sobrellevar la pandemia; además de las decisiones que se han tomado para ayudar a grandes empresas, como sucedió recientemente con el préstamo de US$370 millones para Avianca.
En el marco de la pandemia, el gobierno nacional ha tenido facultades de ser legislador, evidenciando un desequilibro entre el gobierno descentralizado frente al gobierno central. A esto se le suman las acciones que ha emprendido el gobierno que han afectado la libertad de expresión, la libertad de participación y el acceso a la información pública.
Estas decisiones han sido un riesgo a la autonomía y a la independencia de órganos de control y de vigilancia; que precisamente se deben encargar de hacer seguimiento a las acciones del poder ejecutivo, ejemplo de ello, la elección de la procuradora, Margarita Cabello.
Recordar que la Procuradora fue ternada directamente por el presidente. Cabello viene precisamente de ocupar una de las carteras del mandatario, pues era la Ministra de Justicia.
Otra es la elección de Francisco Barbosa como Fiscal General de la Nación, quien fue amigo del presidente en la universidad. A su vez, de hacer parte de su grupo selecto de trabajo, porque fue consejero para los derechos humanos y los asuntos internacionales.
En cuanto al Defensor del Pueblo, Carlos Camargo, el presidente les dijo a los congresistas de la Cámara, que escogieron al defensor que votaran por Camargo. Esto significa que no hay nada que le haga contrapeso al gobierno de Duque.
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Se necesita preservar la separación de los poderes y el equilibro entre pesos y contrapesos. La concentración de poder se puede convertir en mayor riesgo de corrupción y mayor posibilidad de abuso; por parte de intereses particulares, sobre el interés general.
Transparencia Internacional advirtió sobre la «Alarmante concentración del poder en el ejecutivo en Colombia«.