En un reciente debate en redes sociales, Carolina, identificada en X como @LoremIpsum__, ha cuestionado el elevado costo de las marcas de ropa en Colombia.
La polémica surgió cuando Carolina expresó su frustración al intentar comprar productos nacionales, señalando que no considera justo que una prenda «básica» tenga un precio alrededor de los 160 mil pesos.
“Uno quisiera apoyar más las marcas colombianas, pero Ernesto ¿una básica a 160 mil pesos en serio?”, comentó Carolina en su publicación, la cual se volvió viral al alcanzar más de 1 millón de impresiones en X.
¿Está caro la moda colombiana?
Este comentario encendió una ola de reacciones entre los colombianos, generando un acalorado debate sobre las razones detrás de los altos precios de las prendas nacionales.
Mientras algunos usuarios compartieron su descontento, otros defendieron el costo de producción de estas marcas.
Michelle Linero fue una de las que se mostró crítica ante la situación: “Y alguna te responderá con: ‘No eres su target’, pero hay marcas tan lindas y uno va a ver y un pantalón a 398.000 y es 90% poliéster”, expresó, resaltando la percepción de que algunos precios no corresponden a la calidad de los materiales utilizados.
Por otro lado, Alex defendió a las marcas nacionales, poniendo como ejemplo a KOAJ: “A algunos les gusta y a otros no, pero KOAJ es una empresa que hace todo en Colombia, desde el diseño de las prendas, hacer la tela y tinturarla. Todo el proceso, da empleo a miles y ayuda a cientos de aprendices Sena con las prácticas.” Alex subrayó la importancia del apoyo a las empresas que generan empleo y contribuyen al desarrollo de la industria local.
Cristian Casarán también aportó su perspectiva, sugiriendo que el precio elevado de las prendas está influenciado por la percepción de calidad asociada al costo: “Para competir con los precios internacionales, el consumidor se ha creado una falsa idea de que si es caro es bueno. Baja la inflación, tasa de interés, aranceles y los precios siguen igual. Sería bueno una regulación de precios para castigar a los abusivos que dañan el mercado.”
Por último, Gary González ofreció una visión más comprensiva de la situación, considerando los múltiples factores que inciden en el precio final de los productos: “Infortunadamente, hay materiales, costos de maquila, pagos a colaboradores, impuestos, arriendos, etc. que debemos tener en cuenta que hacen que incrementen el valor final de un producto sin embargo hay emprendimientos que en busca de construcción de marca encuentras precio.”
Este debate resalta la complejidad de la industria de la moda en Colombia, donde los consumidores enfrentan un dilema entre apoyar la producción nacional y enfrentar precios que a menudo superan sus expectativas.
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