La fuerza aérea colombiana sacó su poderío con aviones Kfir, helicópteros, fragata y el comando militar en la frontera marítima de Colombia con Nicaragua, cerca de las islas de San Andrés y Providencia.
En una muestra de patriotismo y orgullo nacional, los aviones Kfir sobrevolaron los cielos de San Andrés. «Ratificamos compromiso con la soberanía de nuestra amada Colombia. Ayer, hoy y siempre cumpliremos este mandato constitucional», dijo el general Helder Giraldo, comandante de las Fuerzas Militares en Caracol Radio.
Gobierno Petro defiende la soberanía de Colombia
El presidente Gustavo Petro le sacó la artillería a Nicaragua antes del fallo de la corte de la Haya. (Relacionado: Colombia le gana plataforma continental a Nicaragua: podrá explotar petróleo y gas).
A esta hora los aviones FAC1041 y FAC5766 se encuentran en territorio colombiano, luego se sobrevolar radares nicaragüenses.
Nicaragua mostró interés en la isla de San Andrés por sus recursos naturales y la posible explotación petrolera. Colombia ha liderado la protección de estas riquezas, evitando la presión sobre el Caribe.
Daniel Ortega quería aumentar sus reservas en las famosas 200 millas que ganó Colombia en este último falló. Afortunadamente Colombia respira con más tranquilidad, tanto así que los aviones Kfir están regresando a la base aérea de Rionegro, Antioquia.
La cuenca del Caribe es rica en hidrocarburos y Nicaragua manifestó su interés en 2002. En 2010 Colombia propició la exploración y explotación de yacimientos petroleros en la zona. La petrolera estatal Ecopetrol podría aumentar sus reservas con esta buena noticia para el país.
Las islas están controladas por Colombia debido a la adjudicación realizada por los españoles en el pasado. Los habitantes de la región reclaman una deuda histórica hacia ellos por parte de Nicaragua y Colombia.
El gobierno del cambio ahora deberá invertir en el desarrollo de estas islas que han sido abandonadas por el Estado.
🇨🇱 Gabriel Boric criticó las violaciones de derechos humanos en Venezuela y Nicaragua.
