Se presentaron por lo menos cinco muertes, una de ellas en Ibagué y las otras cuatro en Bogotá, luego de la final de la Copa América en la que Colombia quedó subcampeón ante Argentina.
En el país se registraron más de cinco mil llamadas de la comunidad a la policía, la mayoría relacionadas con inconformidades por reuniones después del partido.
No sabemos aceptar la derrota
El director de la Policía Nacional, el general Nicolás Rojas, ha informado que se impusieron más de 1200 comparendos conforme a la ley 1801.
Además, se realizaron aproximadamente 25 capturas relacionadas con peleas o riñas. Los homicidios en la capital fueron resultado de estas riñas, utilizando armas blancas; tres personas ya han sido capturadas por el atroz crimen.
El comandante de la Policía de Bogotá, el general José Daniel Gualdrón, ha declarado que los eventos ocurridos la noche posterior al partido y en la madrugada evidencian el mal comportamiento de algunas personas.
Según la Policía Metropolitana, los lugares dispuestos por la Alcaldía lograron reunir a más de 50.000 personas sin incidentes, siendo las confrontaciones después del encuentro deportivo.
Se atendieron 1322 riñas, de las cuales 26 resultaron en heridas leves con armas blancas. Se incautaron tres armas de fuego y 180 armas blancas.
Los incidentes de intolerancia que llevaron a estas peleas fueron gestionados por equipos especializados en control de riñas.
El general Gualdrón atribuye estos actos en parte a la ingesta de alcohol: «Se deben a la intolerancia, al consumo de alcohol y, en algunos casos, al consumo de estupefacientes”.
Estos datos proporcionados por la Policía Metropolitana forman parte del balance del fin de semana en la capital colombiana. Todavía se siguen entregando reportes a nivel nacional.
Normalmente, en un sábado y/o domingo, se reportan entre dos y tres homicidios como promedio al cierre del fin de semana.
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