La alcaldesa de la ciudad de Bogotá, Claudia López, ha sido una de las más criticadas por el manejo que le ha dado al paro nacional indefinido por varias de sus polémicas y contradictorias declaraciones.
Para muchos, la alcaldesa se ha convertido en la mayor decepción electoral.
El pasado de Claudia
Claudia López, la mandataria de la capital del país, fue desde siempre una de las más fuertes candidatas para alcanzar el Palacio Liévano en Bogotá.
Sus propuestas, su carácter y su posición dentro de la comunidad LGBTI la llevaron a ser ampliamente aceptada por la población por quienes creían que su mandato sería para el pueblo.
Sin embargo, también ha sido fuertemente criticada por el manejo que le ha dado al estallido social que derivó en un paro nacional indefinido desde el pasado 28 de abril.
Las contradicciones
La alcaldesa en el pasado se mostró en contra de la represión de las manifestaciones por parte de la Policía y el ESMAD, tras uno de los más lamentables casos de abuso de la Fuerza Pública, la muerte del estudiante Dilan Cruz.
ESMAD en Bogotá
No obstante, durante el tiempo en que se han mantenido las protestas en Bogotá, el ESMAD ha sido protagonista de la violencia y la represión para los jóvenes.
Muchos han sido agredidos, torturados, abusados, retenidos ilegalmente y desaparecidos por las autoridades ante la mirada indiferente de la Alcaldía.
Incluso, las madres de primera línea fueron atacadas con gases lacrimógenos y bombas aturdidoras.
La comprensión de la crisis del pueblo
Tras recuperarse de la Covid-19, la alcaldesa reconoció la poca comprensión que había alcanzado de las insatisfacciones de la población, por lo que anunció nuevos proyectos de rescate social y denunció violaciones a los derechos de los manifestantes ante los organismos defensores de derechos humanos.
Estigmatización de la protesta
Más tarde, aseguró que había maniobras políticas detrás del paro nacional, y que muchos marchantes estaban siendo financiados, en su mayoría, por el movimiento político del senador Gustavo Petro, la Colombia Humana.
Este señalamiento, sin pruebas, también fue rechazado al considerarse que reduce y deslegitima la movilización social utilizando las mismas estrategias de estigmatización del uribismo.
Negativa de militarización
Hoy, nuevamente niega cualquier posibilidad de militarización de Bogotá mientras ella sea alcaldesa, esto, ante el anuncio del presidente Duque sobre el mayor despliegue de la Fuerza Pública en las principales ciudades del país.
Cada postura, casi que opuesta y excluyentes entre sí, ha generado confusión y decepción en gran parte de la población bogotana y del país.
