Varios fotógrafos y periodistas que cubrían las manifestaciones el pasado 28 de mayo, en el sector de Ciudad Jardín en Cali, fueron agredidos por la Policía y por civiles armados mientras realizaban su trabajo.
En algunas transmisiones que se estaban haciendo en vivo vía Instagram y Facebook, se puede evidenciar que hay civiles disparando contra los manifestantes y hacia dónde está la prensa.
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A pesar de que habían uniformados de la Policía presentes, no intervinieron, ni capturaron a quienes disparaban.
Al menos cuatro personas fallecieron en las protestas en la ciudad de Cali, cuando se cumple un mes del inicio de esta ola de manifestaciones. Los nuevos fallecimientos elevan hasta 47 la cifra oficial de muertos registrada en ese periodo, incluyendo dos policías.
Estos casos de agresiones a la prensa, especialmente a manos de la fuerza pública ya se habían presentado en Sibaté, Duitama, Bogotá y Medellín.
El gobierno nacional, por medio de la fuerza pública ha dejado clara su respuesta de no escuchar, ni negociar; pero si hay una clara intención para agredir, asesinar y desaparecer a los jóvenes.
La pregunta es ¿Quién autoriza a la fuerza pública para que dispare a una comunidad indefensa?
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Los periodistas también han sufrido agresiones
La violencia contra los periodistas ha tenido una escalada en el marco del paro nacional. A pesar de que los hechos han sido denunciados por diferentes entidades, las agresiones persisten, mientras el gobierno guarda silencio.
Aunque los comunicadores están protegidos por toda clase de leyes, normas y tratados, no solo en el ámbito nacional, sino también en el internacional; en estas tres semanas se han registrado más de 129 agresiones a casi 150 periodistas.
La Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), ha llevado la cuenta del número de agresiones, amenazas, obstrucción para hacer su trabajo, robo de material y hostigamiento, entre otras cosas, que han enfrentado los reporteros tratando de hacer su trabajo.
Es importante mencionar que nunca se había presentado este nivel de agresión contra los periodistas en Colombia.
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