Después de 21 años de resistencia contra el desplazamiento y el despojo, el Estado ha cumplido finalmente con los campesinos, devolviéndoles las tierras que les fueron arrebatadas por los paramilitares en Las Pavas, municipio de El Peñón, Bolívar, en 2003.
El Gobierno Nacional ha entregado 50 resoluciones de adjudicación para terrenos ubicados en el municipio de El Peñón, corregimiento de Buenos Aires, y títulos de propiedad de los predios Chipre I y II, y El Provenir, en el mismo corregimiento.
Entrega de la Hacienda Las Pavas a la Asociación de Campesinos de Buenos Aires
Esta entrega marca un hito significativo para el Gobierno al poner fin a más de dos décadas de conflicto agrario, subrayando su compromiso con la reparación integral de los campesinos y el restablecimiento de sus derechos.
La Agencia Nacional de Tierras (ANT) destacó que la adjudicación del predio Las Pavas es un logro importante, resultado de una larga lucha de la Asociación de Campesinos de Buenos Aires (ASOCAB), que enfrentó violencia, desalojos, quema de cultivos, amenazas y una larga espera en los trámites.
Las 50 familias beneficiarias, miembros de ASOCAB, ahora ven cumplida su aspiración de ser legalmente reconocidos como propietarios de estas tierras, que podrán labrar con tranquilidad y libertad.
José del Cristo Nieto Chávez, campesino beneficiado con la entrega, se mostró agradecido con la ANT por la entrega de los predios: “Siento una felicidad enorme, es imposible describir lo que ha hecho el gobierno. A pesar de que la lucha fue difícil, aquí estamos triunfantes dispuestos a sembrar en nuestra tierra”.
La comunidad campesina de Las Pavas, que recibió el Premio Nacional de Paz en 2013 por su valiente resistencia, espero por años por este reconocimiento oficial. La Agencia Nacional de Tierras, al entregar finalmente las resoluciones de adjudicación, reafirma su compromiso con la justicia y la reparación para aquellos que han sufrido despojos y violencia.
Por otra parte, Felipe Harman, director general de la ANT, sostuvo: “1550 hectáreas que ingresan también en este sistema de reforma agraria y que van a tejer la tranquilidad de cada uno de los campesinos y campesinas, que durante 24 años resistieron el olvido, la indiferencia, la violencia, el desconocimiento profundo de las dinámicas del territorio, hoy son propietarios de la tierra”.
El caso de Las Pavas es uno de los más representativos del despojo de tierras en Colombia. Este conflicto involucra un conjunto de 14 predios que abarcan 3.000 hectáreas, que fueron codiciadas por diversos paramilitares.
Más tarde, la empresa palmicultora Aportes de San Isidro comenzó a reclamar la propiedad de la finca, lo que desencadenó una prolongada batalla legal. En varias instancias, la justicia respaldó finalmente a los campesinos en su lucha por recuperar las tierras.
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