José Félix Lafaurie, esposo de Cabal, culpa a Iván Cepeda por el desprestigio de la Fuerza Pública

José Félix Lafaurie arremete contra Iván Cepeda
José Félix Lafaurie / Iván Cepeda.

José Félix Lafaurie, presidente ejecutivo de Fedegan y esposo de la polémica senadora del Centro Democrático, María Fernanda Cabal, señaló en uno de sus más recientes trinos que el senador Iván Cepeda es quien busca desprestigiar la imagen de las Fuerzas Militares y la Policía colombianas.

Además, aseguró que, para tal labor de desprestigio, el senador estaría utilizando mentiras que influencian a la opinión pública.

Lafaurie arremete contra el senador Iván Cepeda

Mucha polémica han suscitado los comentarios de José Félix Lafaurie con respecto al senador del Polo Democrático Alternativo, Iván Cepeda.

Según el esposo de María Fernanda Cabal, Cepeda habría emprendido una campaña de desprestigio de la Policía Nacional y de las Fuerzas Militares, algo que no tendría mucho sentido, teniendo en cuenta la realidad de la Fuerza Pública colombiana ya conocida por la comunidad internacional.

El desprestigio de la Fuerza Pública no necesita promotores

En el marco del paro nacional indefinido y con una clara mayoría de protestas pacíficas, la Fuerza Pública ha utilizado la violencia excesiva, letal y desproporcionada para intentar reprimir la manifestación social.

Esto ha desembocado en graves violaciones a los derechos humanos, asesinatos, agresiones, retenciones ilegales, abusos sexuales y desapariciones de manifestantes, además de los ataques a representantes de la prensa en el país, que ya completan la alarmante cifra de 300 agresiones en dos meses de paro.

Esta realidad brutal de la Fuerza Pública colombiana fue dada a conocer mundialmente por la Human Rights Watch, la ONG Temblores, el Parlamento Europeo, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, y el Congreso norteamericano, quienes han enfatizado en la importancia de una reforma profunda en materia de derechos humanos para las fuerzas de seguridad colombianas.

Además de esto, la revelación de la JEP de los falsos positivos y la reciente noticia de la participación de exmilitares del Ejército Nacional en el asesinato del presidente de Haití, evidencian que no es necesario intentar desprestigiar a la Fuerza Pública del país, sino que los escándalos que ha protagonizado, por sí mismos, han generado alarma a nivel nacional e internacional.