Colombia sufre la terrible noticia de una matanza que se produjo en la vereda Alto Remanso en Puerto Leguizamo, en el departamento del Putumayo, zona fronteriza, al parecer por parte de uniformados del Ejército Nacional que estaban en un operativo que pretendía capturar a dos miembros de Comandos de Frontera. Estaban en un bazar, pero Diego Molano dio la orden de bombardear a niños.
La Revista Cambio reveló un video donde muestran la información de la masacre, contada desde la versión de los testigos que presenciaron el ataque y el asesinato de varios de los miembros de la comunidad, dentro de los que se encontraban menores de edad.
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En la vereda Alto Remanso, el pasado sábado 26 de marzo se habría iniciado la celebración de un bazar en el que se buscaba la recolección de fondos para mejorar la infraestructura de una de las escuelas del lugar y la construcción de un tramo de vía, ya que solo se puede acceder a la vereda por el río.
La celebración duró dos días hasta el lunes 28 de marzo cuando hombres del Ejército se presentaron en el lugar vestidos con buzos negros y muy barbudos, haciéndose pasar por uniformados de las disidencias de las FARC.
Sin embargo, según testimonios, la vereda no es un campamento guerrillero ni hay presencia de tales grupos.
Supuestamente, el francotirador del Ejército habría reconocido a un hombre muy parecido al que pretendían capturar, por lo que abrió fuego, seguido de los demás uniformados.
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El hombre sería el presidente de la Junta de Acción de la comunidad, y habría sido asesinado. Luego, comenzaron a escucharse más disparos en las viviendas cercanas donde los presentes en el bazar fueron encerrados y atacados con las armas de fuego.
Tras los tiroteos, murieron 11 personas, dentro de las que se encontraban también menores de edad, luego de que los supuestos guerrilleros se quitaran los buzos y quedaran con uniformes camuflados.
Al final, los uniformados manipularon la escena del crimen haciendo pasar a los fallecidos como combatientes de las FARC asesinados en combate.
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