La talentosa actriz y escritora Margarita Rosa de Francisco parece haberse cansado de las teorías que insisten en que las protestas, los jóvenes en las calles y todo el estallido social que vive Colombia, responden al patrocinio, influencia y jugadas políticas de unos pocos, del comunismo, o de Rusia.
De Francisco pidió que “dejen de insultar la inteligencia de una generación que piensa y decide con autonomía”.
El movimiento social
Desde el pasado miércoles 28 de abril, hace más de un mes, se ha venido desarrollando en Colombia una serie de manifestaciones y movilizaciones sociales ininterrumpidas en distintas ciudades del país.
Lejos de lo que se pensaba, que el paro nacional respondía a la reforma tributaria propuesta por el gobierno, en realidad es el resultado de la insatisfacción de la mayor parte de la población nacional que viene cansada de décadas de hambre, pobreza, corrupción y falta de oportunidades.
Sin embargo, todas esas décadas de sufrimiento de la clase obrera colombiana se han visto agudizadas en el presente gobierno de Iván Duque, que se ha dedicado a enriquecer a los más ricos y empobrecer a los más pobres.
Las teorías conspirativas
El paro nacional, que hoy es indefinido, pretende que el gobierno dialogue con la población y escuche sus necesidades. En su mayoría, los manifestantes son jóvenes ávidos de educación y de oportunidades.
Sin embargo, un sector de los colombianos autodenominado como “gente de bien”, y dentro del que se distinguen a los afines al gobierno uribista, insisten en estigmatizar el estallido social reduciéndolo a maniobras políticas de Nicolás Maduro, Gustavo Petro y Juan Manuel Santos.
Incluso, con la influencia de Venezuela, Cuba, China, Rusia, el comunismo y el marxismo y el castrochavismo.
Para los manifestantes y para la misma Margarita Rosa de Francisco, esta teoría constituye un insulto a la inteligencia de la juventud que se encuentra en las calles.
Ellos han defendido sus causas y sostienen que el paro nacional es resultado del inconformismo social, algo que ellos mismos han podido analizar durante años de injusticias.
Un movimiento social no requiere de financiación, ni de anzuelos, ni de trampas políticas, es el pueblo cansado sin tendencias ni afiliaciones que exige el cumplimiento de sus derechos.
Por ello es ofensivo que se siga promoviendo que los jóvenes son seres pusilánimes movidos por cualquier viento de ideología y sobornados por dineros y campañas políticas.
El trino
El trino de Margarita fue respuesta al comentario de un tuitero, que comentó uno de sus más recientes estados en Twitter: