“A mí me gustaría no morir, no morir en la historia, pero creo que es un reto muy grande y además, muy ambicioso” Jaime Garzón.
El trabajo de investigación nunca ha sido fácil en América Latina. Ya sea que investiguen bajo regímenes autoritarios, enfrenten importantes riesgos de seguridad en una región donde el desafío adicional es la impunidad o informen en medio de continuas dificultades financieras con todos los riesgos que conlleva informar sobre corrupción y narcotráfico. Desde este contexto nace Razón de Estado un proyecto para proteger el periodismo investigativo independiente en América Latina.
En medio de las condiciones que enfrentamos los periodistas de investigación en Latinoamérica se presentará en esta conferencia internacional un diagnóstico de los casos de persecución a periodistas independientes y alternativos en estos países con el software Pegasus.
Adicionalmente, se expondrán los innumerables desafíos de la prensa, cuestionando ¿Quién vigila al vigilante? en un contexto de responsabilidad Estatal con la libertad de expresión.
Los periodistas de la región han estado haciendo oír su voz durante décadas, arrojando temas cruciales a la luz, a través de proyectos de investigación que hacen que los periodistas podamos revelar “las terribles verdades ocultas por el poder económico y político”, en algunos casos pagando un precio muy alto.
En el evento organizado por BU Reims Champagne-Ardenne/Red de bibliotecas y mediatecas de Reims Francia se presentarán los resultados de la investigación liderada por la Agencia de prensa Canal24Es en conexión con medios de comunicación de Colombia como Pluralidad Z y Tercer Canal, con relación al caso Pegasus y la persecución permanente a periodistas incluso en estado de exilio por parte de los organismos de seguridad de Estado multilaterales.
El periodismo colaborativo parece haberse afianzado con relativa facilidad en América Latina, donde ha sido utilizado como herramienta para ampliar investigaciones, establecer conexiones y abordar temas como la corrupción, que no se limitan a un solo país, en este contexto la agencia de prensa Canal24Es presenta el proyecto Razón de Estado, diseñado como una herramienta de insumos informativos para todos los medios independientes de Latinoamérica.
Los desafíos que enfrentan los medios de comunicación de la región son numerosos y muchos periodistas han dado la voz de alarma sobre los mismos riesgos: varios mencionaron la viabilidad financiera, las amenazas de muerte, la persecución digital y el acoso judicial. Coraje, valentía y perseverancia son tres palabras que describen la batalla de las ideas en medios alternativos de Iberoamérica.
“D’un autre oeil” es un ciclo de conferencias sobre ciencias humanas y sociales en la mediateca Jean Falala ofrecido por la Biblioteca Municipal de Reims y la Biblioteca Universitaria URCA. La conferencia será presentada por Daniel Mejía Lozano con la traducción de Gala Limón.
Según Reporteros sin Fronteras, Colombia sigue siendo uno de los países más peligrosos del continente para los periodistas. La cobertura de temas relativos al medio ambiente, los conflictos armados, la corrupción o la connivencia entre políticos, empresas, grupos armados ilegales y mafias expone sistemáticamente a los periodistas al acoso, la intimidación y la violencia.
En Colombia ciertos casos de vigilancia y espionaje de periodistas por parte del Estado, de años anteriores, siguen sin respuesta judicial. Una gran parte de los medios regionales están controlados por fondos públicos o empresas locales, limitando así su capacidad crítica.
Los medios comunitarios, independientes y alternativos cuentan con fuentes de financiación reducidas, muchas veces dependen de los gobiernos regionales, mientras que, en el ámbito digital, los ingresos publicitarios han aumentado considerablemente, y al menos dos medios independientes viven ya de la contribución económica de sus audiencias en la ciudades capitales, en el ámbito regional aún viven del poder político de turno.
Finalmente, Reporteros sin Fronteras manifestó que la cobertura de temas medioambientales, como la minería o la deforestación, así como todos los relativos a conflictos armados, la reclamación de tierras, la organización comunitaria, los derechos de las comunidades étnicas o las instancias de los acuerdos de paz exponen a los periodistas a la violencia.
La seguridad de los profesionales de los medios también se ve gravemente amenazada cuando cubren temas relacionados con la corrupción, la expansión de los cárteles mexicanos y las alianzas entre políticos, grupos armados y empresas.
