Lo que se conoce de la niña mexicana con un IQ superior al de Albert Einstein

Adhara Pérez la niña genio mexicana
Adhara quiere ser astronauta.

Adhara Pérez es una niña mexicana de tan solo 9 años de edad, que presenta un coeficiente intelectual altísimo. De acuerdo con las pruebas, su coeficiente es de 162, lo que supera por un par de puntos al genio científico Albert Einstein, e incluso, al famoso físico, astrofísico y cosmólogo, Stephen Hawking.

Adhara padece el conocido síndrome de Asperger, un síndrome del espectro autista, asociado a una alteración neurobiológica, que limita su capacidad de interacción y comunicación verbal y no verbal, además de generar áreas de interés muy absorbentes en quien lo padece.

No obstante, las personas con síndrome de Asperger siempre han manifestado capacidades intelectuales superiores a la población sin este tipo de trastornos.

Le podría interesar: Faber Burgos, el joven colombiano logra ver el planeta tierra con una cámara unida a un globo de helio

Adhara, con tan solo 5 años ya había culminado sus estudios de básica primaria, tardó solo dos años en completar su bachillerato, y a sus nueve años ya se encuentra cursando dos carreras universitarias: Ingeniería Industrial en Matemáticas e Ingeniería de Sistemas.

En el caso de la Ingeniería de Sistemas, la niña recibió una beca del 100% que le permite acceder a esos estudios.

La pequeña fue elegida por la Revista Forbes de México como una de las mujeres más poderosas de su país.

Su sueño siempre ha sido ser astronauta, por lo que se está preparando para ingresar a la Universidad de Arizona, en los Estados Unidos para formarse como astrofísica.

Desde ya, está participando en el programa International Air and Space Program (IASP) y en cursos de ondas gravitacionales y astronomía observacional en la Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Astronomía.

Adhara aspira a ganar una beca que le permita estudiar en la Universidad de Arizona, ya que sus padres no cuentan con la economía suficiente para solventar los costos de su educación.

Son muchos los padres que han lamentado el poco o nulo apoyo de los gobiernos para financiar la formación y educación de este tipo de niños superdotados que, en su mayoría, no poseen recursos para acceder a programas diseñados para su nivel intelectual.