Los cinéfilos que regresen al cine este verano después de los cierres inducidos por la pandemia tendrán que lidiar con otro posible drama fuera de la pantalla: la escasez de palomitas de maíz, dulces, refrescos y otros bocadillos. Estados Unidos está preocupado por escasez de gasolina para el verano.
La inflación, un mercado laboral ajustado y las interrupciones en la cadena de suministro están afectando negativamente la disponibilidad de alimentos y bebidas en las salas de cine, según The Wall Street Journal.
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Los operadores de cine también están teniendo dificultades para reabastecer los artículos clave de los puestos de comida, como las bolsas que contienen las palomitas de maíz y los revestimientos brillantes que evitan que la mantequilla se derrame, informó el Journal.
La escasez de oferta ha obligado a los cines a limitar las ventas a envases que no sean de papel, ya sea de plástico o de metal, que también funcionan como anuncios de películas taquilleras.
“Al final del día, tienen que tener algo para poner palomitas de maíz”, dijo al Journal Neely Schiefelbein, directora de ventas de Goldenlink North America.
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Las interrupciones en la cadena de suministro también han afectado los envíos de bandejas de plástico que contienen hebras de regaliz, vasos de plástico, bandejas de nachos y sabores de refrescos.
Algunos propietarios de cines han tenido que comprar vasos sin usar de teatros rivales que han cerrado y luego usarlos para servir bebidas a los clientes, aunque el logotipo de los vasos es el de un competidor.
“Es un desastre”, dijo al Journal Jeff Benson, director ejecutivo de Cinergy Entertainment Group, que administra ocho salas de cine en Carolina del Norte, Texas y Oklahoma. Con el levantamiento de las restricciones pandémicas, la pantalla grande está experimentando un renacimiento a medida que los amantes del cine se alejan de los servicios de transmisión como Netflix.
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