Satena (Servicio Aéreo a Territorios Nacionales) es la única aerolínea colombiana que desde hace 60 años, se ha impulsado con sus propias alas sin que el gobierno le invierte tanto como lo hace con otras empresas de vuelos.
Aunque esta sociedad no tiene vuelos internacionales, llega a muchos rincones de Colombia que ni las grandes sociedades han podido llegar.
Satena es la principal operadora aérea del Puente Aéreo de Bogotá.
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¿Cómo nació Satena?
El expresidente Alberto Lleras Camargo firmó el decreto 940 de 1962, que daría como fruto a lo que hoy se conoce como SATENA.
En ese tiempo, había zonas a las cuales se podía llegar por transporte aéreo de las fuerzas militares pero se prefirió comprar algunas flotas para vuelos especialmente comerciales operados por las Fuerzas Armadas.
Estos aviones fueron utilizados para cubrir rutas hacia San Vicente del Caguan (Caquetá), Bahía Solano (Chocó), Mitú, Puerto Leguizamo (Putumayo), La Macarena (Meta) e Inirida.
También sirvieron para cubrir desastres como la de Armero, el terremoto de junio en 1994 y la tragedia de Mocoa.
¿Cómo se mantiene Satena si el gobierno no le colabora?
Aunque sea una aerolínea comercial, sus ingresos son derivados por atender necesidades.
Algunos gobiernos han visto la necesidad de esta empresa y son pocos los que le han ayudado como fue Lleras Camargo y Lleras Restrepo.
Cabe resaltar que Satena ha tenido grandes crisis económicas como las que tuvo en el 2010 (donde Álvaro Uribe invirtió para salvarla) y sin embargo, no dejó de funcionar ni se declaró en bancarrota como lo hizo Avianca.
Latam por su parte tiene ayuda desde Chile y Perú, y Vivaair porque se valen de los vuelos baratos.
Flota
Son 12 aviones de corto y mediano alcance que cubren 35 destinos repartidos en 19 departamentos.
Solo pueden viajar aproximadamente 80 pasajeros mientras que en otros aviones se puede viajar de hasta 250.
¿Y si la plata que le darán a Avianca se la dan a Satena?
Aunque Satena es una aerolínea de propiedad del Estado Colombiano no se reconocen inversiones actuales por parte del gobierno, pero si de inversiones a otras empresas extranjeras para salvarla mientras la salvación puede estar aquí.
Satena es el as bajo la manga que podría reemplazar a Avianca pero parecen estar cegados por el monopolio.
Finalmente, son 90 millones de dólares que ayudarían a alzar el vuelo a Satena para aterrizar en zonas que ni la misma Avianca puede llegar y por qué no, a expandirla internacionalmente.